14 may 2009

Ángeles o Demonios...

Son molestos, ruidosos, inaguantables... su timbre de llanto y grito se mete en el oído como un "bicho" y nos perfora el tímpano. Sus escándolos nos estropean la comida a los que disfrutamos de un restaurante...

Padres... échense una siesta después de la comida! Comiencen a conocer a sus niños!!!

CÓMO CONSEGUIMOS PARAR LAS LLAMADAS DE ATENCIÓN DE LOS NIÑOS.

SON INAGOTABLES... PERO ESTÁN CANSADOS.

1. Ignora las pataletas: aprenderá que las pataletas no son eficaces y cada vez las utilizará con menos frecuencia. Hay que tener en cuenta que, al principio, el niño incrementará la respuesta pero en poco tiempo empezará a mejorar. Paciencia.

2. Técnica del Rincón: si la pataleta se prolonga más de lo que puedes resistir, ponga al niño en una silla en una habitación donde no pueda verle pero usted pueda controlarle. La duración... tantos minutos como años tenga el niño. Se les dirá que deben quedarse allí y permanecer tranquilos al menos durante 30 segundos. A un niños mayor se le puede enviar a su habitación, utilizando los mismos tiempos.

3. Sistema de elogios y recompensas como refuerzo: su niño no "siempre se porta mal". Los comportamientos adecuados del niño (en ocasiones desapercibidos) que realiza durante el día tienen que ser alabados. Fíjese en ellos y recompénsele con pegatinas o puntos que después intercambiará por premios. Los premios deben ser actividades familiares como ir al cine, a la burguer, al parque, alquilar una película... teniendo en cuenta lo que sabe que le gusta a su niño.

4. Intervenir siempre: aguantar la pataleta de su niño en público es todavía más inaguantable... pero es necesario que estas técnicas se practiquen siempre de inmediato, ocurran donde ocurran. Haga las tareas aburridas, divertidas (que el niño vaya tachando la compra en el super de su lista según se va metiendo en el carro).

5. Evite situaciones que provocan pataletas: evite la fatiga y la sobreestimulación de su niño. No sea egoísta... la sobremesa de su café es sumamente aburrida para un niño!

9 Comments:

Tordon said...

Antes de casarme tenía cuatro teorías sobre el modo de educar a los pequeños.Ahora tengo cuatro hijos y ninguna teoría...

Bss
PD:¡Muy bueno el video!

José Luis López Recio said...

Son muy listos, teníamos que estudiar porque cuando nos haceos aduñltos perdemos casi toda la inteligencia, jajaja
Saludos

mmarin said...

¡JAJAJA!.Muy bueno el vídeo.
Pero, ¿está usted segura, Doña Laura, que lo de cara a la pared funciona "en los niños de hoy"?
Paciencia, querida. Somos muchas las madres que lo somos sin tener hijos. ;)

Zayi Hernández said...

tengo dos peques...la menos hace lo mismo que el pequeñito del video...yo no la grabo, pero me río sin que se de cuenta...creo que mis hijos son mi razón de ser y aunque arman sus rabietas ( muy poco, porque son inquietos pero buenos y saben, que cuando se ponen así los ignoro) son una delicia...ha sido lo mejor que me ha pasado en la vida...haberlos tenido es una prueba de que Dios existe y que no importa, cuanto me quita si, a ellos me los deja.
besitos.

Andrea said...

jaja, genial el vídeo, que enano mas listo. Ay las pataletas, nunca tuve demasiada paciencia con ellas, las corté de raíz en cuanto comenzaron, hoy estoy conforme con su comportamiento pero, me ha costado eh? Un beso Laura!

Pele Ón said...

Importante: el niño no tiene conciencia del daño que puede estar provocando, simplemente está "calibrando" comportamiento-respuesta. Hay que estar dispuesto a consolarle en cualquier momento de la rabieta si lo pide, y NUNCA devolverle odio (no siempre es fácil, claro). No hay más remedio que tratarle con cariño también.
Durante esa fase, como en la adolescencia, el niño/joven está descubriendo su cuerpo y su conciencia, y tratando de ubicarse en su entorno. Fracasará muchas veces hasta que se encuentre, hay que comprenderle.
Nosotros también tenemos rabietas, y nos gustaría expresarlas, pero nos reprimimos.

Angel said...

Los niños son un encanto: cuando son de otro.

Un saludo.

Angie said...

Por ahora no tengo en mente tener descendencia, pero esto hace plantearme si llegará el día en que tendré la paciencia y aguante necesarios para educar a un niño (si todos son como el del video, ¡desde luego que no!).

Gracias por arrancarme una sonrisa en un día triste

SOMMER said...

Si todo fuese tan fácil como lo es en la teoría...